El viernes, junto a los del campamento circulante, llegamos sobre las 5 de la tarde tras 7 horas de viaje muy cansados pero con ganas de empezar. Al llegar a la casa de la madre de Pili lo primero que hicimos fue planear los tres días y bañarnos en la piscina.
Esa noche hicimos un concierto a las 22:00 por nuestra cuenta en la Plaza Cervantes donde asistieron las persones que pasaban por allí. También estuvimos difundiendo a la vez.
Ya por la noche nos repartimos las habitaciones y nos tomamos un cacao calentito para finalizar el día.
A la mañana siguiente organizamos unos coros que habían preparado los del circulante. Y salimos a la zona antigua de Santiago para difundir y realizar los coros.
Comimos en la Casa de Cultura y Solidaridad y por la tarde nos encaminamos hacia el colegio de La Salle para reunirnos junto con los demás grupos cristianos. Más tarde hicimos los del juvenil una visita turística por la zona vieja con nuestra guía María y la vuelta la realizamos de forma divertida: con una gincana.
Al llegar de nuevo a la Salle cenamos y, a las 22:00 empezamos otro concierto en un escenario chulísimo con luces y humo y con un público muy entregado. No vinieron el número de personas que nos habían dicho los organizadores porque otro grupo más famoso estaba actuando también a la misma hora pero no perdimos la esperanza y continuamos.
El sábado por la mañana creíamos que nos íbamos a quedar todos afónicos pero no. Desayunamos y planificamos el día. ¿Cómo nos irá?