Hoy salimos de Palencia , después de hacer los servicios cogimos las furgonetas y pusimos rumbo a Valladolid.
Por el camino nos paramos en un centro de discapacitados llamado San Cebrián, donde una trabajadora de allí nos mostró las instalaciones y nos presentó a los residentes.
Después de ver todo el centro, estuvimos un rato jugando con ellos a distintos deportes como el baloncesto, natación, los bolos o simplemente encestar pelotas dentro de una caja.
Nos lo pasamos muy bien con ellos y ellos nos tomaron mucho afecto.
Comimos en Piña, donde preparamos con los suegros de Samuel una suculenta barbacoa de chorizo y panceta y pudimos usar su piscina. Estuvimos allí hasta la hora de cenar, a continuación seguimos nuestro viaje a Valladolid. Allí nos instalamos en el seminario, donde, tras un largo día, pudimos descansar.